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martes, 1 de enero de 2019

UNA DE TANTAS....





Seguro que a la mayoría de nosotros nos meten cada año un embarque de esos que hacen palidecer hasta el más pintado.  Pero es que la afición esta hace que te animes y acudas aun presuponiendo la clavada que vas a recibir.

Esto me ocurrió en una montería la cual prefiero omitir el nombre, así como a la orgánica en cuestión, por respeto a mi gran amigo que tuvo la idea de que fuéramos a probar con dicho personaje al que conoce personalmente por otro temas ajenos a la caza.

La finca “X”, a 350 euros el puesto, en pleno diciembre de este año, y que nos pillaba a unas 2 horas de carretera.  Mi amigo había reservado dicha montería desde septiembre, ya que por lo visto se agotan los puestos en cuanto sale el programa.  

Este fue el primer error, suponer que no debemos ser tontos si hay “tortas” por asistir…


El segundo error es que, pese a las recomendaciones de bastantes conocidos de que no fuéramos con esa orgánica, pensáramos que tampoco sería para tanto.

En fin, la crónica de la muerte anunciada comenzó nada más llegar a la junta.  Un bar donde un enorme cartel ponía que las migas y el café costaban 3,50 euros, y copa de anís 1,50.  Ya me empezó a joder ese detalle de que cobren el desayuno, cuando tampoco es que la montería fuera barata.. pero bueno, la primera en la frente.

Las migas al menos estaban buenas, pero vaya, no me gustaba ni las juntas en los bares ni el detalle ese de pagar por 4 migas locas…  En fin, un largo rato de espera hasta que ya deciden sortear.  El orgánico “Y” comenzó a decir que se podía tirar de todo, menos varetos, que incluso podría haber muflones¡¡¡¡… increíble vaya, parecía que íbamos a arrasar la finca con tanto animal al que poder disparar y sin cupo¡¡¡.

Otro detalle del que se puede uno cerciorar antes de montear de cómo te la van a meter es que allí había bastante más gente para los pocos puestos que anunciaban.   ¿Y el  plano de la mancha?, olvídate… que con los planos no se pueden meter armadas fantasmas de “compromisos” de “Y”.

El sorteo no se dilató en demasía, ya que los sobres sorteados eran pocos (cuantos habría no sorteados??, a saber.).  Mi amigo se acercó cuando le nombraron y sacó el “8” de las Bañas (ni puta idea de si es traviesa, cierre o cueva de mordor…).

Preguntamos a “Y” por el puesto en cuestión y, al verle pararse a pensar como haciéndonos creer que no se acordaba muy bien del mismo, me tuve que reir…
Por supuesto que al final se “acordó” de donde se ubicaba (pese a no ser más de 30 puestos la mancha) y nos comentó que era bueno para venaos, que todos los años cumple y tal y pascual.

En fin, la primera en salir era la armada de las Bañas.  Coño¡¡¡, somos cierre, pues ahora me entero.  Cogemos los coches y enfilamos a la finca, teniendo como postor a un señor operado recientemente de la garganta, el cual no podía ni contestar a cualquier duda que surgiera (más adelante me di cuenta que no fue casualidad que pusieran a dicho postor…).

Un rato de carretera y nos desviamos a un camino real de esos típicos que puede pasar todo tipo de personajes; senderistas, ciclistas, quads, etc… con dos pedazo de mallazos a izquierda y derecha de 2 metros de altura.  El camino continuaba hasta que el postor se para para empezar a colocar la armada.  El panorama no había cambiado en absoluto por mucho que avanzáramos, pero el  1 y 2 tenían que bajarse allí……. ¿Donde cojones se van a poner si estamos en medio de la nada?.  Pues unas tenazas solucionaron el problema en un santiamén, cortando el mallazo de la izquierda para hacer el agujero para poder pasar.   Bonita manera de acceder a un puesto, sep…

Los siguientes puestos no le fueron a la zaga, con el modus operandi de sus tenazas y posturas pegadas a la malla sin tiradero alguno.

Cuando llegamos al nuestro, la cosa no cambió en absoluto.  Me bajo del coche y acompaño al “cortamallas” para que verle "hacer su trabajo".  Esperaba que me señalara a la cuerda para dar vista al otro lado del pequeño testero que teníamos de frente…. Pero no, la tirilla estaba en una charneca a escasos 4 metros del mallazo.  Ah¡, y ni preguntar siquiera ya que, aparte de no poder hacerlo fisicamente, tenía mucha prisa el susodicho en seguir colocando la armada ya que salió de allí disparado.

Madrecita, en menuda cueva nos han metido¡¡¡jajajajaja.  Mi amigo el pobre que no sabía dónde meterse, ya que se sentía responsable de semejante atraco, pero es que a mi me entro la risa.  El puesto, si eso se puede considerar puesto, estaba pegado a una malla de 2 metrazos bien colocada, con su camino real por detrás y otro enorme mallazo al otro lado del camino para hacer la huida de las reses "completita".  Pero es que por delante tendríamos un tiradero de no más de 40 metros pelaos, estando toda la montería al volcar de semejante "testerazo".

Esta es la huida de la finca entonces y por eso somos los primeros en salir???jajajaj.  Sacamos los rifles más por vergüenza que otra cosa y ahí que nos colocamos.  Nos señalamos con el 9 y aquello no mejoraba la historia, ya que el pobre estaba igual o peor que nosotros, teniendo al 10 más cerca si cabe.

Ni sé cuando soltaron los perros, ya que no los llegué a ver hasta última hora de vuelta, cuando parece ser que “Y” decidió que asomaran por la parte alta de los tiraderos de nuestra armada, que por cierto, componía casi la mitad de los puestos de la mancha.  Bah, ya no podía decir que no había visto ni los perros…

Ni que decir tiene que ninguno de los 10 "afortunados" de la armada pegó un solo tiro.  3 varetos estuvieron pasando arriba o abajo (precisamente lo único a lo que no se podía disparar), y ya está, ahí acabo todo, como era de esperar.

Recogiendo los bártulos apareció “Y” con su coche y se paró, teniendo dicha conversación con mi amigo.
                        -     (“Y”)   Qué, cómo se ha dado?? (con la cara de piedra ante su falta de vergüenza).       
                        -     Nada, sólo hemos visto pasar 3 varetos…
                      -     (“Y”)    Es que ha sido raro, porque todas las reses corrían para abajo en vez de para esta armada.  Bueno la comida está por allá y blablabal.

Mi cara era un poema.  ¿Encima se ríe en mi cara?. ¿De verdad se piensa que nos vamos a tragar eso de que lo raro es que no vinieran aquí, con dos mallazos de 2 metros y con un camino real entre ellos pasando coches cada 2x3?.  En fín, por respeto a mi amigo me quedé callado ya que la cosa no iba conmigo, pero que encima sienta cierto recochineo por parte de “Y” ya era la guinda del pastel.

Bueno, la comida normal, mientras íbamos comentando la jugada con el resto de monteros.  Allí había muchos de nuestra armada, pero nadie decía ni mu ni se levantaba voz alguna.  Lo raro es que casi nadie había tirado, pero algunos tiros si que había escuchado en la parte opuesta.
Cachis, parece ser que lo que hemos tenido es mala suerte, hoy el viento no nos ha acompañado..jajaja

Empezaron a llegar reses, llegándose a la veintena en total quitando ciervas.  Algunos venaos bonitos y 3 navajeros completaban un plantel que cumplió con lo esperado para tan pocos puestos.  Pero, ¿dónde se había abatido todo?, y sobre todo, ¿quiénes? No había más que quedarse un rato hasta que se fueran la mayoría de los monteros y empezasen a “florecer” los triunfadores de la jornada¡¡¡.

Y, oh casualidad, resulta que el 90% de las reses abatidas correspondían a los amigos y familiares de “Y”¡¡¡¡.  Uno con 2 venaos y 2 cochinos (que ni corto ni perezoso nos contó que le tocó un puesto y se lo cambiaron a la armada triunfadora), el cuñado de “Y” con un venao y un cochino , etc….

Nos quedamos a esperar a “Y” de recoger las últimas reses y nos despedimos.  Mi amigo le miró al estrecharle la mano para esperar al menos alguna explicación, y éste recibió como respuesta un pequeño giro de la cabeza como para decirle….esto es lo que hay figura, si queréis más venís a la siguiente.

Impresionante el embarque, no le faltó un detalle a la jornada. Se cumplieron cada una de las premisas para saber que te están atracando a mano armada, de ahí que lo escriba.

Encima 2 horas de vuelta a casa hicieron el día completo, menos mal que al final nos lo tomamos con humor indagando cual es la siguiente mancha que da “Y” para poder intentar ir……..jajaja

En fin, todos caeremos en más de estas tarde o temprano, es sólo cuestión de tiempo que las ganas por montear nos haga aceptar asistir a cualquier cosa de medio pelo que nos cuadre…

Así que sólo queda preguntar.. ¿Cuál será la siguiente??.

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